El programa de mano, describe, en su sinopsis, que CASI NORMALES (de Brian Yorkey) es la historia de una familia que lucha por ser “normal” ante la adversidad que se les aparece constantemente, o sea… una familia como todas. Esa familia, que esta integrada por la madre Diana, ama de casa con serios problema de personalidad. El padre Dan, incondicional y abnegado marido. Natalie, la hija que trata de ser perfecta pero se siente invisible en su casa. Y Gabriel, el hijo que quiere “quedarse”. Si bien el texto es muy fuerte, el final que se le dio en la adaptación local no condice mucho con la trama anterior que no pareciera llevar a ese final, pero eso no desmerece en nada el espectáculo en su conjunto. Verdaderamente no tengo palabras para describir lo que sentí cuando termine de ver este musical. Es realmente impresionante con la calidad que toca temas absolutamente dramáticos. Se me pone la piel de gallina al recordar cada momento de la obra para poder escribir mi mirada sobre la misma. A medida que se va desarrollando la historia, es como que me fue hipnotizando porque quería saber cómo se desataría el nudo central de la obra. Pase por las emociones mas dispares, desde la risa por los disparates que al principio demuestra el personaje de la madre, esa madre bipolar pero enternecedora, hasta el llanto con otras actuaciones que no quiero adelantar para no anticipar a los espectadores, por que sinceramente es algo que hay que vivirlo en carne propia, siempre pensé que las tragedias musicales eran exclusividad del género de la ópera, pero evidentemente y por suerte no es tan así. Acá queda demostrado que una tremenda historia dramática, llena de amor y de locura, puede ser contada através de la música y las canciones. Obviamente todo acompañado de unas excelentes actuaciones y una dirección y puesta en escena magistral. Empecemos a hilar finito en lo que respecta a la parte artística, no pude dejar de conmoverme y maravillarme, con la calidad artística e interpretativa de LAURA CONFORTE (la madre) que en el transito de la obra pasa por momentos totalmente disímiles pero con una ternura y una compenetración del personaje que es impresionante, en ningún momento me pareció que estuviese actuando, sino viviendo, desde lo mas íntimos de sus entrañas, todo lo que le va sucediendo a su personaje. Mis más sinceras felicitaciones. ALEJANDRO PAKER (el padre) también muy correcto en sus interpretaciones tratando de salvar a esa madre inmersa en su locura y desesperada por recuperar lo irrecuperable, solo que en algunos temas no se le entiende lo que canta y desafinoóen varias oportunidades. MARIANO CHIESA (los diferentes psiquiatras) muy buenas actuaciones para delinear a la gama de psiquiatras que uno puede encontrar ante sus necesidades psicológicas. Debo confesar que por momentos lo detesté, lo cuál indica que esta interpretando bien su rol. FLORENCIA OTERO (la hija) Correctísima actuación y sobresaliente en el canto, está maravillosa en el cambio que hace su personaje para tratar de salvarse de los que intentan ser “normales”, es un personaje delicioso. FERNANDO DENTE (pretendiente de la hija) es una interpretación impecable de lo que es la juventud hoy en día, mejor personificado imposible, y como siempre esa ternura y afecto que le pone a todos sus personajes. MATIAS MAYER (el hijo que no quiere irse) Con una voz impresionante compone a ese hijo tan particular de una forma fantasmagóricamente fantástica. Todos juntos y cada uno de ellos se mueven con una frescura y desenvoltura exacta sobre la escenografia totalmente moderna y súper funcional que lo transporta al espectador a cada uno de los ámbitos en los cuales se desarrollan las acciones, escenografia diseñada por MARCELO VALIENTE No puedo dejar de mencionar la partitura musical, muy acorde a la trama y sobre todo a la época que se esta viviendo. Precisa, justa, envolvente, un tanto fuerte (volumen muy alto) en alguno momentos pero la orquesta está muy bien dirigida por el genial GABY GOLDMAN. Sobresaliente es la cronometrada puesta en escena dirigida por LUIS ROMERO. Es un montaje con una producción de lujo, donde uno se siente parte de esa familia, y a su vez ve en el escenario parte de la familia de uno. Sinceramente es una obra que enorgullece a la cartelera teatral porteña, sumamente recomendable y da para sentarse a debatir, café de por medio con los amigos. FELICITACIONES A TODO EL EQUIPO y las hago extensivas a JAVIERFARONI por producir semejante espectaculo.Mi puntaje es un nueve (9). Hasta mi próxima mirada…
